El paro en España baja en 193.400 personas en 2023, la tasa más baja de un 4º trimestre desde 2007
La bajada del paro supone un 6,4 % menos que en el año 2022, situando el crecimiento del empleo en un 3,8 % más, y cerrando así el año por encima de los 21 millones de personas ocupadas y con menos de 3 millones de personas desempleadas, según los datos de la EPA que ha publicado el INE esta misma mañana.
La mayor parte del empleo se ha generado en el sector privado, con 715.900 nuevas personas ocupadas, más del 91% del total, y la mayoría de los puestos de trabajo generados han sido a tiempo completo, con un incremento de 695.400 personas, frente a 87.600 nuevos empleos a jornada parcial.
Aumentan también ligeramente los contratos indefinidos hasta el 5,6 %, lo que se traduce en 800.000 personas indefinidas más, y se reducen por tanto los contratos temporales en 140.300, un 4.5 % menos.
Por desgracia, puntualiza el secretario general de USO-Illes Balears, Juan Antonio Salamanca, "muchos de estos contratos indefinidos se extinguen al poco tiempo de empezar debido al bajo coste del despido, que de algún modo, ofrece el despido en bandeja de plata para que las empresas lo apliquen a su antojo".
Otro dato a destacar es que, un poco más de la mitad de los empleos creados, han sido para mujeres, situándose el porcentaje en el 56 % con respecto a un 44 % para puestos de trabajo ocupados por hombres
USO-Illes Balears celebra estos datos: "valoramos los mismos como positivos pero nos parece importante enfatizar que España continúa a la cola del desempleo en la Unión Europea, con la tasa de paro más alta de toda la Unión, incluso por encima de países con menor PIB que nosotros, como Grecia, que sin embargo tiene mejores datos de empleo. Por no hablar del paro juvenil, que sigue siendo una lacra en la que continuamos destacando por abajo", advierte Salamanca.
Además, la responsable de Igualdad de USO-Illes Balears, Margarita Munar, señala que, “en el último trimestre se han incrementado los hogares con todos sus miembros en paro, lo que supone cerca de un millón de familias en las que ningún miembro trabaja, con el riesgo de pobreza estructural que esto conlleva y el aumento de las desigualdades, que van generando una brecha social cada vez mayor. Por esto, creemos que es necesario seguir reclamando más políticas de protección social que posibiliten corregir las desigualdades y generar un empleo estable y de calidad”.
