Paro Registrado de septiembre 2020: de nuevo, malas noticias para Illes Balears

Recién conocidos los datos de Paro Registrado de septiembre, facilitados por el SEPE, podemos decir que Illes Balears es, una vez más, la región de toda España con peores datos (intermensuales e interanuales) porcentualmente, lo que se ha convertido en 'lógico' dado que hablamos del últimos mes fuerte de la temporada de verano y eso, unido a la coyuntura actual de la pandemia de COVID-19, ha terminado por desnudar las carencias de variedad productiva de nuestras Illes.

77.112 personas están actualmente registradas en las listas del paro, esto es, 36.935 más que en septiembre del año pasado, o lo que es lo mismo, un incremento del 90,98 %. En comparación con el mes anterior de este año, agosto, vemos un incremento del 4,55% del desempleo (3.359 personas demandantes más). Referido a la afiliación, en septiembre bajaron en 13.258 los afiliados con respecto a agosto (-2,58%) y en 74.712 en comparación a septiembre del año pasado (-13%), con lo que los ocupados a finales del recién pasado mes son 500.077 en total.

Todo ello en un mes en el que, a nivel nacional, sí es cierto que el paro baja a nivel mensual en 26.329 personas (-0,69%; aumento de un +84.013 nuevos trabajadores en septiembre), pero no menos cierto resulta que, en comparación con septiembre de 2019, son 696.774 personas paradas más (+22,62%), dejando el total en 3.776.485 personas paradas.

En USO Illes Balears, además de reiterar nuestros claros mensajes lanzados en las valoraciones de PR de los meses anteriores (en realidad, del último año), preguntamos: ¿Qué vamos a hacer ahora? ¿Cuál es el plan, ahora que el verano se va? ¿Hay plan? ¿Hay plan para afrontar un período en el que a la circunstancia de fin de temporada de turismo veraniego de cada verano se suman también los efectos devastadores que la pandemia está dejando a nivel sanitario, social y económico?

No han sido pocas las veces que tras grandes crisis y adversidades han surgido las grandes respuestas, los planteamientos que han dejado de presentar medidas que salgan al paso y que, por el contrario, conlleven miras de futuro. En este sindicato seguiremos ofreciéndonos para aportar, para formar parte de esos acuerdos con los agentes políticos, empresariales, sindicales y sociales que planteen los avances en oferta laboral y en seguridad para la clase trabajadora que esta región necesita para desquitarse del yugo que supone la casi exclusiva dependencia del turismo de verano. Porque si seguimos como hasta ahora, nuestra economía seguirá abocada a depender permanente de un único hilo. Y eso no es propio de planteamientos modernos. Eso es quedarse atrapado en el pasado.

Y por supuesto: 1º) es urgente parar la sangría que afecta al empleo entre jóvenes y mujeres; 2º) es imprescindible invertir en la sanidad y la educación públicas (emplear a más gente, invertir en más medios, en más investigación, bajar las ratios en las aulas, etc.); y 3º) cuanto antes, ha de gestionarse mejor la crisis sanitaria, porque hasta que esta no mejore, el resto seguirán empeorando: la social, la laboral, la económica...