BALEARS, OASIS DESESPERANZADOR EN UN DESIERTO DE DESEMPLEO AL ALZA

Si las circunstancias de la vida dependen de si ver el vaso medio lleno o medio vacío, no cabe duda de que los datos de paro registrado aportados esta mañana por el SEPE nos llevan a tratar de vislumbrar sus conclusiones a través de un vaso con poca agua a la que agarrarnos, y mucho espacio vacío.

De ponernos espléndidos, podemos destacar que, junto con Melilla, Illes Balears es la única región de toda España que se salva del aumento de paro en el último mes ((266 parados menos, descenso mensual del desempleo del 0,44%, lo que deja el total de parados en 60.855 personas). Pero, siendo realistas, tanto el porcentaje del descenso de parados como el resto de números que el último mes arroja -en nuestra comunidad y en todo el país- hacen que en USO Illes Balears veamos con preocupación la tendencia en la que estamos inmersos.

"Dando por sentado que cada mes de enero suele ser negativo por el final de la contratación temporal navideña, el recién concluido enero ha sido el peor desde 2014: en Illes Balears, la escasa caída del paro contrasta con la subida de un 1,06% interanual; mientras que en España hablamos de 244.044 nuevos desempleados en el último mes, 90.248 más que en diciembre, siendo este el peor dato de afiliación en enero desde 2013. La salvedad del caso balear no es sino un oasis en un desierto de aumento de desempleo y ni siquiera da para esperanzarse mucho, porque la tendencia interanual y la poca diversidad de oferta laboral nos hacen ser no muy optimistas de cara al futuro inmediato", aclara Juan Antonio Salamanca, secretario general de USO Illes Balears.

Aun así, en nuestro sindicato "valoramos la (escasa) bajada del paro mensual en Balears, y seguiremos apostando por desestacionalizar y ampliar las salidas de empleo, ofrecer programas de incorporación laboral de jóvenes y mujeres, y luchar junto con sindicatos y agentes sociales por la consolidación de convenios y de contratos indefinidos y estables, en contra de los de tipo temporal, aún demasiado presentes en nuestra comunidad", afirma Salamanca.